Feudo de Naedia

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Uno de los grandes feudos del Imperio de Ingrad. Los territorios boscosos de Naedia son regidos por la Casa Trinoms. Se encuentran al noroeste del Imperio, lindando con Dhogam por el oeste y el frío mar de Is por el norte.

En esta región aún hay bosques vírgenes mucho más salvajes y peligrosos que los de Aslar, que solo las patrullas de exploradores de la Casa Trinoms se atreven a explorar. Además, su cercanía a los Montes de Nyzaria hacen que la región sea muy abrupta y esté surcada de una infinidad de arroyos rápidos que cortan el terreno en cientos de acantilados.

La exuberancia de estas tierras hacen posible que sus gentes se dediquen principalmente a la caza y la recolección. En la mayor parte de asentamientos de Naedia hay un agente Imperial dependiente del Consejo del Poder conocido como el guardabosques. A su disposición tiene hombres dedicados a mantener despejados los caminos, reparados los miles de pequeños puentes y vigilar el movimiento de las grandes manadas de bestias o los grandes predadores.

El feudo de Naedia ha sido históricamente la principal región de reclutamiento de la Legión VII “Intrépida”.

La capital del feudo de Naedia es la ciudad de Valleviejo. Se encuentra en una encrucijada en la que confluyen los principales caminos del feudo y, además, media docena de arroyos de montaña, se encuentra pués en el interior de un frondoso valle rodeado de colinas escarpadas, lo que la hace inexpugnable de manera natural. Al tener una orografía tan particular Valleviejo ha tenido que crecer a lo alto, y sus edificios de madera se encaraman medio escavados en las escarpadas rocas y alcanzan en muchas ocasiones las 7 u 8 plantas, gracias a estar apoyados parcialmente en escarpados riscos. La altura de los edificios y lo umbrío del valle hacen de Naedia una ciudad de callejones y puentes oscuros, hollada por sombríos montaraces, nada acogedora al visitante. Entre los dos mayores riscos de la ciudad se alza como un puente que une ambas cumbres el castillo de los Trinoms, Puenteviejo.

Los pocos habitantes de las zonas del norte de este feudo, que lindan con el mar de Is, no reconocen la autoridad de la Casa Trinoms, y siguen a un líder llamado Garragélida.